EL PINCHO MORUNO DE PEGASUS
© Fernando Garrido, 4, V, 2022
Hasta antes de ayer para la mayoría de españoles víctimas de la LOGSE, “pegaso” podría sonarles a una marca nacional de camiones robustos. Y para los que felizmente se libraron de los planes de estudios socialistas, “pegaso” es además un ejemplar del bestiario mitológico heredado de la Antigua Grecia. Es es
el caballo volador propiedad de Zeus, el Dios primus inter pares. Pegaso es un magnifico corcel alado nacido de la sangre que brotó de la cabeza cortada por Perseo a la temible Gorgona Medusa, la del pelo ensortijado con sierpes.
Esta semana pasada veníamos oyendo a los poderes independentistas, golpistas y terroristas, junto a una parte del gobierno pedir la cabeza de una miembro del propio gobierno. Pero no, nada que ver con el mito. Ni SNCHZ es Perseo ni la ministra MARGOT es la Gorgona, y tampoco busquen a Medusa en la figura de la Mari cheli BTT, la servil presidente del Congreso que, aunque con el cabello así con permanente retro fashion, no lleva serpientes sino la pelambrera estropajo de la perra lanitas.
Pegaso o Pegasus sin embargo, ha sido el dolor de muelas de todos ellos, por ser el dispositivo de espionaje israelí adquirido por el gobierno español para supuestamente defender al Estado de sus enemigos. Como lo son sin duda todos aquellos socios gubernamentales presuntamente espiados. Y digo bien porque, según ultimas noticias, al parecer también han sido espiados SNCHZ y MARGOT que hacen pandi con aquellos. Sin embargo, los golpistas contumaces dicen que les espió el CNI de la ministra MARGOT. Ella no contesta ni que sí ni que no, pero que si lo fuesen “bien y legalmente espiados serían”.
Con Pegasus en manos y en boca de SNCHZ y la banda, se está escribiendo un chusco vodevil de espías Anacletos, Torrentes o Mortadelos y Filemones con zapatofonos pinchados en un palo.
Al noble Pegaso lo han transmutado en un prosaico y cómico Clavileño, caballo de leño y clavos, como el que sirvió para embromar a don Quijote y Sancho que, montados sobre él, creyeron cabalgar los cielos. SNCHZ emulando no a don Alonso Quijano, sino al ex-coletudo PBLO, quisiera quizás asaltarlos para quitar el puesto a Zeus. No es broma.
El esperpento puede que sea del mismo cuño que aquellas navajas y balas ensangrentadas que se auto enviaban a sí mismos o se hacían enviar, para salir afligidos y llorando por las teles y tratar -sin éxito- de dar un golpe electoral en Madrid porque “aquello iba de democracia” contra VOX y AYSO.
Eso sucedió por estas fechas hace un año. Las mismas en que ahora dicen le espiaban a Pedro I el mentiroso.
El caso es que SNCHZ y la ministra han descubierto de repente haber sido así mismo espiados. Por tanto, si todos son espiados, todos son una misma víctima y eso debería servir de coartada para seguir adelante con los faroles del golpe pentapartito. Aunque nunca se sabe.
Es todo un espectáculo bochornoso de basura estelar propia de los enredos de Tele-5, con Rociíto, David Flores, las Campo, los Pantoja-Rivera y la troupe de mariquitas cotillas de medio pelo que allí moran.
La televisión vive bien del lío, sea del corazón o del político, a veces no fácilmente distinguibles una cosa de la otra. Por eso las tertulias de politólogos a sueldo de la banda, tienen con Pegasus un suculento culebrón que desmadejar para distraer dogmatizando al personal y echar las culpas de la bronca a quien les vayan ordenando desde arriba.
De momento, ya que no pueden señalar a VOX ni a PTIN, porque Rusia ni ABSCL tienen a Pegaso en su cuadra, apuntan a Marruecos para que sus jefes fumen la arguila de la paz y prosigan en comandita el desmontaje del Estado, el cambio de régimen y el reparto de despojos. Pero quizás en esta ocasión esos opinadores influencers metan la gamba diciendo verdad sin saberlo. Me explico.
Recordemos la foto de SNCHZ, sentado a la mesa del Sultán de Marruecos, con la bandera y escudo de España boca abajo.
Una foto indecente que puede ilustrar la traición del gobierno español a nuestros hermanos saharauis.
El inexplicable cambio de posición de España al respecto, sin que aparentemente se gane nada sino lo contrario, podría ser un paso más en la agenda ideológica de venta y recalificación de la nación española o tal vez una contingencia para salvar SNCHZ su pellejo presidencial. Creo más bien esto último.
Mientras la prensa amiga de SNCHZ, y necesariamente enemiga del estado español, quitaron importancia al hecho, calificándolo de “anecdótico fallo protocolario”, la oposición interna y externa –excepto VOX- lo interpretó, mordiéndose la lengua, como un signo de debilidad de un presidente -supuestamente democrático- plegado a una dignidad tiránica africana… Desde luego que en un análisis superficial, la infamante foto que afrenta gravísimamente a la nación española, puede interpretarse así. Pero no.
Existe en esa foto algo más que una colleja de mala educación por la cual un autócrata moro se mofa de un aprendiz aspirante a obtener similar estatus autoritario.
Es imposible tanta torpeza gratuita, de uno y otro lado del mantel. Pensemos tan sólo en el séquito de funcionarios y personal que acompañan a un presidente en una embajada internacional de alto nivel y sus preparativos. No es posible algo tan aparatoso, grave y obsceno en un entorno formalmente cortesano sin consentimiento y complicidad de las partes. No es posible.
Es verdad que SNCHZ sistemáticamente se baja el tanga claudicando a las pretensiones de sus chulos por indignas e ilegales que esas sean.
Pero creo que la foto de Rabat es más que eso, es una foto buscada, obligada y necesaria, que responde a un chantaje o a una prueba iniciática de ingreso a una organización, club o logia. Tal vez responda a ambas cosas a la vez.
¿Qué tendrá guardado el Sultán africano, de SNCHZ? ¿Tendrá que ver precisamente con las escuchas de Pegasus que ahora se ventilan para sofocar las iras de separatistas y golpistas?
No es la primera vez que la inteligencia de Marruecos interviene virtualmente en golpes de estado en este país. El 11-M es buena prueba de ello, un asunto que se tapó con la complicidad del directamente perjudicado, el Partido Popular.
Esa foto con la bandera invertida es una señal, un símbolo iniciático, una afirmación probatoria que había de ser vista y recibida en distintos salones del Planeta para convalidar un compromiso de inquebrantable fidelidad a una causa. Es una prueba o parte de un viaje que sinceramente no sé exactamente a donde conduce… Pero en cualquier caso, pagaremos muy caro este picho moruno de caballo volandero, criado en del mierdero de las cuadras de SNCHZ “Augías”, para estafarnos en su ferial de las vanidades.